viernes, 26 de febrero de 2010

Nottin Hill - Portobello Road

   
 
Paseo por Portobello: puestos de antigüedadessouvenirs, excentricidades, sombreros, encajes... vintage por doquier! El sábado por la mañana la calle de Portobello en Nottin Hill es una riada de turistas en la que navegas haciendo tu personal aportación de ocupación del espacio público. Una más entre la multitud. 
Hay que mentalizarse contra la idea de "petado". Es Londres y no abren sólo para ti, Julia Roberts y Hugh Grant. Así que echa un vistazo desde el extremo de la calle, piensa y decide rápido si formas parte de la marabunta o no. Vale la pena. Las tiendas son para todos los gustos. Hay vintage auténtico a precios autenticamente caros. Para muestra un botón, los zapatos talla 38 de Alexander McQueen por 260 libras.

Hay second hand auténtico a precios autenticamente baratos. Cosas originales que de tan originales no sabes ni para que sirven, ni donde ponerlas, ni que córcholis son. Souvenirs a tutiplen, imitaciones horribles, imitaciones logradas, chinadas de plástico fantástico, pura fibra artificial, modeletes de chaqueta Beattles en sargent peppers...de todo y para todos los gustos.
Los escaparates de las tiendas se convierten en auténticas obras de arte kitch. El de la foto está forrado de lazos de colores de regalo. Precioso. Se les va la olla. Pasas del kitch a lo surreal en un pis-pas.En un extremo del mercado justo después de pasar por debajo de un puente está ubicado éste bar-furgo-portátil. Muy trendy tomarte un té hundida en uno de los sofás mientras revisas con tus amiguitas los modeletes que has comprado!!!
En el centro de la calle, de repente, empieza a sentirse el olor a comida. La gente choca y se apretuja, sorry por aquí, sorry por allá. lo unos con los otros, se quedan embobados con las cosas de zampar. Hay para todos los gustos, bollería con donuts gigantes rellenos de crema cubiertos de glasa de colores increíbles, brownies, galletas, trozos de bizcochos deliciosos.


En medio de la calle cocinan paella, big roll de chorizo, sea food y otras comidas típicas de la gastronomía del mundo. El big roll de chorizo es un bocata de pan con un montón de rúcula, un buen chorizo partido por la mitad para que no salga disparado al primer mordisco, unas lonchas de queso gordas que se derriten con el calor y venga explosión de aromas, sabor y calorías.

Una chica vestida muy elegante ha pasado por mi lado apretujando como podía su big roll choricero para poder hincarle el diente. El chorizo se asocia a vulgar, bastorro, eructos pestilentes a ajo (cuando se repite que es siempre) la palabra misma... cho - ri - zo, puede ser cualquier cosa menos glamurosa... y ves una chica tan mona, tan bien vestida, tan fina, tan elegante apretando su bocata que chorrea aceite como si fuese un mini-aspersor de lluvia naranja, la rúcola se descontrola se sale por arriba y por abajo, las moléculas del chorizo aplastado no encuentran suficiente lugar entre el pan y se despanzurra por los lados. Un bocata así solo se puede manejar bien si has nacido pulpo y tienes ocho brazos o si te sientas en els durante 15 minutos, que calculo es el tiempo mínimo que necesitan los ingredientes para integrarse entre si como si fuese hormigón armado.
Me ha entrado un hambre que no se puede explicar con palabras. El bocata de chorizo me encanta pero lo voy a dejar para otro día que esté más preparada psicologicamente. Tengo que comer algo ya!!!
Me acerco al puesto de sea food. Si eso que se ve en la foto. Un cajita de plástico de la que pueden comer tres cuesta 4 libras. Pido si es posible half y me dicen que ni soñarlo acompañado de una mirada en la que se lee entre líneas aparta que detrás de ti hay 20 personas que esperan su ración. Me iba medio llorando cuando de repente mis pies han desobedecido mis ordenes, no sé como me he encontrado de nuevo pidiendo la ración. La chica rusa que me lo ha dado me ha mirado con una sonrisita.

El surtido de sea food se compone de colas de gambas rebozadas y sin rebozar, patas de cangrejo también rebozadas, colas de langostinos abiertas por la mitad a la plancha. El adjetivo rico se queda corto, mejor riquiiiiisimoHealthi? Hoy voy a hacer como que esa palabra no existe. A la pregunta ¿con salsa? he dicho que si. Ya que nos ponemos nos ponemos de verdad. Maldita sea mi estampa. La salsa era de esas traidoras y casi cuando estaba terminando me ha empezado un ardor en la boca que me ha llevado a pensar -¿cómo es posible? si estoy terminando y esto está el doble de caliente. La pregunta sólo da una leve idea de la sensación real que he tenido. Me he abrasado las papilas gustativas. En ese momento me dan un trago de salfuman y me parece fanta, ni me entero. El resumen es que estaba buenísimo. Como postre me he metido entre pecho y espalda un trozo de carrot cake y un trozo de brownie a 1 libra cada uno. Por 2 libras, dos pasteles caseros de tamaño espectacular y sabor tremendo. En este mercado hay que comprar en los puestos de la calle y comer de pié de la mejor manera que puedas. Es barato, buena calidad y anécdota asegurada (seguro que te va a pasar o vas a ver algo divertido).
Mi anécdota ha sido que he escogido un lugar en la acera y un rayo de sol me ha iluminado casi todo el rato. Parecía una santa. Han sido dos nubecitas que se han separado un poco y un rayo se ha escapado para darle luz a mi pecado.
Los puestos de fruta y verdura tienen mucha variedad. Productos exóticos de todas partes del mundo.
Iba a comprar unos espárragos, que ilusa, he pensado podían ser de la zona, cuando leo en la etiqueta que vienen de Perú. Al precio de 6 libras los he soltado rápido. Que lástima los había visualizado a la plancha con pimienta recien molida, sal maldon y un chorrito de aceite de oliva. Tienen mucha verdura en la versión baby. Es ese tamaño pequeñito que en España sólo se usa en restauración y siempre que el restaurante sea de cocina de vanguardia. Me ha llamado la atención ver las berenjenas chiquititas y los calabacines en versión mini. Hay infinidad de verduras y frutas orientales. En Londres si que te puedes animar a cocinar recetas asiáticas, hay todo lo que puedas imaginar y más. Dios mior, se me acumulan las ideas, están empezando a estrujarse las unas contra las otras a ver cual se realiza antes. 
Dato curioso una ramita de romero fresco cuesta la friolera de 2 libras... con la cantidad que tenemos nosotros en nuestro bosques. Sin ir más lejos en casa de mis padres esta plagado. Eso lo ve mi madre y ya monta el negocio del siglo hasta a mi se me ha pasado por la imaginación.

Que tal estaría yo con un puestecito en medio del mercado vendiendo ramilletes de romero. Venga nena que los tengo a una libra. Mi furgo cargada de material aparcada al lado, mi platito de sea food asegurado, dándole los goodmorning a mis compañeros de parada, te humeante para pasar el frio... que chachis como me gustan son las cosas simples!!!... ay, la imaginación!
Dato de importancia: El domingo ni soñarlo encontrar el mercado abierto. También cierran muchas tiendas. El día perfecto es el sábado.
       

martes, 9 de febrero de 2010

Marylebone farmer´s market - Bonne Bouche

Son las diez de la mañana. Estoy en Bonne Bouche, Marylebone Hiht street. Una pastelería-cafetería de esas que me gustan. Estas sorpresas las encuentro por casualidad mientras paseo, anoto la dirección y cuatro cosillas más en mi libretita y me sirve para darme el regalo gastronómico especial  fin de semana adaptado a mi economía.
La gente está desayunando. Por primera vez veo el breakfast english. Es un plato combinado que puede llevar huevos fritos o revueltos, salchicha inglesa, beicon, champiñones, alubias en salsa y patatas. Se puede pedir en diferentes versiones combinando esos ingredientes a gusto del consumidor. Una bomba que va directa a las lorcitas. Es un breakfast para valientes. Entre la mezcla de sabores, las texturas, la forma de cocinarlo, frito en un 90%, el olorcillo que desprende… para valientes, sin duda. Y lo dice una servidora, que por la mañana me pego un desayuno con ensalada incluida. Ahora que, más normal es comer así que tomarte un café y salir corriendo. Calculo que para quemar una mínima parte de las calorías que tiene el breakfast english te tienes que ir a darle dos vueltas completas a Hide Park, si puedes tres, mejor.
La Bonne Bouche tiene cocina y prepara unos pasteles que abren los ojos como platos y se te escapa un que rico, me voy a poner como una chanchita!!!
Hacen unos sanwitxs que dejan a la altura del betún a todos los que venden envasados en los establecimientos tipo EAT, Pret a Manger, M&S…. Es una de las muchas diferencias entre las franquicias del mundo globalizado, que abundan en las grandes ciudades y los establecimientos de toda la vida o más al estilo de antes.
Todo lo que te puedes comer aquí tiene muchos menos conservantes (hay que mantener la quimica a raya), es más fresco, mayor cantidad, el sabor real y verdadero de las cosas recién elaboradas, la estética personalizada de los productos. Nada que ver con lo global ¿El precio? Increíble,más barato ¿El servicio? con contacto humano!
Para que voy a seguir partiendo lanzas entre lo personalizado y la franquicia cualquiera con dos dedos de frente ve las diferencias.

Me he pedido un café moka 2,20L y un trozo bien grande de apple pie 1,95L. No puedo describir el sabor. Es imposible con palabras. Mirad la foto ¿Qué me decís del dedo de espumita espesa del café? He deseado que no se acabe nunca. He deseado envejecer sentada en mi silla de madera, casi al lado de la puerta, que cada vez que se abre me entra un buen chorro de aire ultra-frio, dándole cucharadas a mi pastel de apple pie. Soy feliz (que putada que sea tan feliz comiendo, me gustaría ser así de feliz haciendo deporte) Hoy va a ser un gran día, seguro. Me lo he comido a la velocidad del rayo. Quería hacerme la finolis comiendo despacito para aprovechar y entrar en calor mientras escribo las cosas que me pasan por la cabeza, después se me olvidan. Hay pruebas demasiado difíciles para mi, comerme en media hora un pastel que tengo a 50 centímetros… no puedo. A mi me dura la mitad.
Antes de la excursión a la Bonne Bouche he pasado por el Marylebone farmer’s market. Es un mercado de productos orgánicos. De payeses o agricultores de la zona hablando claro. Lo hacen al aire libre. Pegaba una buena rasca y los vendedores con las mangas de la camisa arremangadas. Aquí se ven unos extremos muy curiosos. Al lado de alguien en manga corta puede haber otro alguien forrado en ropa.

Los puestos del mercado son de lo más normal sin decoración ni nada que los haga atractivos a la vista. Cuatro hierros, plancha de conglomerado y marchando. A los productos que venden no les hace falta decoración, el márquetin de producto sobra. La calidad salta a la vista. Contra una zanahoria fresca con sus hojas verdes y tierra seca pegada como va a competir una zanahoria en una bolsa de plástico del super iluminada de tal forma que casi parece fluorescente.

Venden pasteles y bollitos tradicionales, carrot cake (con este pastel tengo un idilio sin fin), apple pie, caramel and nougat, brownie… La parada del pan es un placer. Panes hechos con harina biológica y levadura natural, con espelta, pipas de girasol, nueces… Mención honorífica a la parada del yogurt. La semana que viene vengo a comprarme uno o dos…o tres.
Suerte que mis deseos se verán regulados por mi economía. Suerte para mis lorcitas claro y una pena para mi sensibilidad. Cada día vendría a comprar a este mercado.
Las verduras son del tiempo, coles, calabazas, ruibarbo, tubérculos varios. Lo más original es el puesto de patatas. Hay patatas de color violeta. Son moradas por fuera y por dentro. Pongo un enlace por si a alguien le interesa el tema de la patata.

En las fotos que he hecho el mercado (que me han salido fatal, pero es que tenía mucho frío) se ve más desierto que el Arizona, no es de extrañar, es domingo a las 9 de la mañana. A la única zumbada que se le ocurre salir de excursión a esa hora es a moi. Creo que he sido de las primeras en llegar.

Es un mercado pequeño, muy pequeño. Desde luego que se nota que en las grandes ciudades hay poco interés en los productos frescos. Claro, todo esto se tiene que procesar y la vida en las grandes ciudades no deja espacio ni tiempo para ir a comprar, colocar la compra en casa, imaginar el plato que vas a cocinar y ponerte manos a la obra.
Ir al mercado es divertido. Dejarte engatusar por el deseo de probar productos nuevos que quizás no conocías es un buen entretenimiento . Hoy la gran sorpresa ha sido la alcachofa de Jerusalén (tupinambó)  me he informado de dónde procede, pongo link.

Se me ha ocurrido que voy a preparar un menú british. Le voy a pedir a mis nuevas amigos-as de intercambio inglés-español,  si quieren compartir la experiencia conmigo.
A ver que os parece? Como van a ser platos muy consistentes, plato único y postre. Se aceptan sugerencias.

Patatas violeta rellenas, gratinadas con queso cheddar
Appel pie

Pastel de carne con puré de alcachofas de Jerusalén
Carrot cake

Quiche de ruibarbo y queso stilton
Muffin de maracuyá y mango (este muffin me lo he comido en otro lugar de estos tipo cafetería, restaurant que alimentan alma, espíritu y michelines)

Aprovecho para contar la última de Bruno. Escucho la sintonia de Verano Azul, sí, sí  el silbido aquel que todos hemos cantado un montón de veces.  Entro en el comedor y lo veo que ha puesto un video de la serie. Le digo -Bruno, estás viendo verano azul! y me dice  - si velano asul (recuerdo que tiene 5 años) - Anda pués esa serie es de cuando yo era pequeña y me suelta Bruno - y  ¿polqué chanquete ha muelto? 
No me he tirado al suelo a revolcarme de la risa para que no se asustase. Que fuerte. De todas las preguntas, de todas las cosas que se le podían haber pasado por su cabecita y va... y me pregunta ¿porqué Chanquete ha muerto? No me digais que no tiene gracia.